Con el fin de promover sus inversiones en las comunidades de Puerto Rico, la Agencia Federal de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) anunció cinco seleccionados que recibirán más de $3.4 millones para evaluar y limpiar terrenos de Brownfields en Puerto Rico, avanzando así la justicia ambiental. Estas inversiones a través de los programas de Brownfields de la EPA ayudarán a transformar propiedades contaminadas, vacantes y abandonadas en bienes comunitarios, creando a la vez buenos empleos y estimulando la revitalización económica en comunidades agobiadas por la contaminación.
La subadministradora de la EPA, Janet McCabe, el subadministrador adjunto, Cliff Villa, y la administradora regional, Lisa F. García, anunciaron las selecciones en la Plaza del Mercado, en el casco de Río Piedras con líderes de la comunidad local.
“Hoy es un momento crucial para Puerto Rico, ya que canalizamos una inversión histórica de la agenda del Presidente Invertir en América hacia la rápida evaluación y limpieza de los sitios que han sido una carga para las comunidades durante demasiado tiempo”, señaló subadministradora de la EPA, Janet McCabe. “Estos fondos, una parte significativa de los cuales proceden de la histórica Ley Bipartidista de Infraestructuras, dotan a las comunidades puertorriqueñas de los recursos necesarios para convertir las tierras contaminadas en faros de progreso y optimismo. Es un compromiso no sólo para revitalizar estas zonas, sino también para fomentar un legado de salud, prosperidad y protección del medio ambiente para las generaciones venideras.”
“El programa de Brownfields es una herramienta poderosa que ayuda a las comunidades en Puerto Rico a atender las desigualdades locales al proporcionar un medio para revitalizar propiedades abandonadas y promover la salud ambiental, el crecimiento económico y la creación de empleos”, indicó la administradora regional de la EPA Lisa F. García. “Este nuevo financiamiento le da al programa una excelente inyección, con una cifra histórica de $1,500 millones que se aprovecharán para marcar una diferencia real y duradera para las comunidades de todo el país.”
Se seleccionaron a las siguientes organizaciones en Puerto Rico para recibir fondos de Brownfields de la EPA:
La Asociación de Residentes de La Margarita, Salinas, Puerto Rico ha sido seleccionada para recibir más de $401,000 para hacer un inventario, dar prioridad y hacer evaluaciones ambientales en lugares del vecindario La Margarita de Salinas. Los fondos apoyarán nueve evaluaciones iniciales y hasta 10 evaluaciones detalladas que incluyen muestreo. Los fondos también se utilizarán para desarrollar seis planes de limpieza y reutilización y para involucrar a la comunidad. El vecindario de La Margarita en Salinas incluye un lugar industrial antiguo de 7.9 acres, un complejo antiguo residencial multifamiliar de 6 acres, un antiguo supermercado, una propiedad residencial abandonada y un antiguo hospital.
Barceloneta, Puerto Rico, fue seleccionad para recibir $500,000 para hacer un inventario, dar prioridad y hacer evaluaciones ambientales en lugares del distrito norte de Barceloneta. Estos fondos financiarán hasta 11 evaluaciones iniciales y segundas evaluaciones detalladas, que incluirán un muestreo. Los fondos de la subvención también se utilizarán para desarrollar hasta 10 planes de limpieza y reutilización y para involucrar a la comunidad. El distrito norte de Barceloneta incluye una ferretería abandonada, un antiguo hospital, una incubadora de empresas vacante de 10 acres, un antiguo centro de recreación de 4.7 acres y un edificio vacante de fabricación de ropa de 3.2 acres.
El Fideicomiso Para el Desarrollo de Río Piedras, San Juan, Puerto Rico ha sido seleccionado para recibir $1,000,000 para crear un invenario, dar prioridad y hacer evaluaciones ambientales y limpiar sitios en Casco Urbano de Río Piedras de San Juan. Los fondos apoyarán 13 evaluaciones iniciales y una evaluación detallada que incluye muestreo. Los fondos de la subvención también se utilizarán para desarrollar seis planes de limpieza, limpiar el sitio de 2.6 acres del Colegio La Milagrosa e involucrar a la comunidad. El Colegio La Milagrosa fungía como escuela y cuenta con 14 edificios y se sabe que está contaminado. Otros lugares prioritarios incluyen un antiguo teatro que sufrió daños por el huracán y un terreno vacante adyacente a un vecindario residencial.
Isabela, Puerto Rico ha sido seleccionada para recibir $500,000 para hacer un inventario, crear prioridades y hacer evaluaciones ambientales en ciertos lugares del distrito central de Isabela. Los fondos costearán 12 evaluaciones iniciales y hasta 11 evaluaciones detalladas que incluyen muestreo; también se desarrollarán hasta 10 planes de limpieza. Los lugares prioritarios en el distrito central de Isabela incluyen una antigua área industrial de 5.7 acres, una antigua fábrica de papel de 7 acres, dos edificios escolares antiguos y un lugar comercial vacante de 14 acres adyacente a un vecindario residencial.
Naranjito, Puerto Rico fue seleccionado para recibir $1,000,000 y llevar a cabo 11 evaluaciones iniciales y 11 evaluaciones detalladas que incluyen el muestreo de lugares en el distrito de la montaña de Naranjito. Los fondos también apoyarán seis planes de limpieza y seis planes de acción correctiva. Los fondos de la subvención también se utilizarán para limpiar cinco de los sitios prioritarios e involucrar a la comunidad. Los sitios prioritarios incluyen un antiguo hospital de 0.6 acres, una gasolinera cerrada de 0.3 acres ubicada a orillas del río La Plata, una comunidad de 27 acres que carece de infraestructura adecuada y dos edificios escolares vacíos y deteriorados.
Muchas comunidades que están bajo presión económica, particularmente aquellas ubicadas en áreas que han experimentado largos periodos de desinversión, carecen de los recursos necesarios para iniciar proyectos de limpieza y reurbanización de terrenos de Brownfield. A medida que los terrenos de Brownfield se convierten en bienes comunitarios, atraen empleos, promueven la revitalización económica y transforman las comunidades en lugares sostenibles y ambientalmente justos.
Gracias al histórico impulso de $1,500 millones de la Ley Bipartidista de Infraestructura del presidente Biden, el Programa de Brownfields de la EPA ayuda a más comunidades, como nunca antes, a poder comenzar a luchar contra los desafíos económicos, sociales y ambientales causados por las zonas industriales abandonadas y estimular las oportunidades económicas y la revitalización ambiental en comunidades históricamente agobiadas por estos retos.
El Programa de Brownfields de la EPA adelanta la Iniciativa Justice40 del president Biden que estableció el objetivo de que el 40% de los beneficios generales de ciertas inversiones federales fluyan a las comunidades desventajadas que se ven marginadas por la falta de inversión y agobiadas por la contaminación. El Programa de Brownfields se esfuerza por cumplir con este compromiso y promover la justicia ambiental y las consideraciones de equidad en todos los aspectos de su trabajo. Aproximadamente el 86% de las solicitudes de los programas suplementarios de multiuso, evaluación y acción correctiva (MAC, por sus siglas en inglés) y subvenciones de fondos de préstamos rotativos (RLF, siglas en inglés) seleccionadas para recibir fondos propusieron trabajar en áreas que incluyen comunidades desventajadas.
Antecedentes adicionales:
La EPA seleccionó estas organizaciones a fin de recibir fondos para abordar y apoyar la reutilización de terrenos de Brownfields con el objetivo de enfrentar los desafíos de salud, económicos, sociales y ambientales causados por los terrenos de Brownfields. La EPA prevé que se otorgarán todos los premios anunciados hoy una vez que se cumplan todos los requisitos legales y administrativos.
El Programa de Brownfields de la EPA comenzó en 1995 y ha aportado casi $2,700 millones en subvenciones destinados a evaluar y tomar acción correctiva en propiedades contaminadas y poder devolver a estas su uso productivo. Antes de la Ley Bipartidista de Infraestructura, este programa ofrecía aproximadamente $60 millones cada año. Gracias a las inversiones históricas del presidente en Estados Unidos, la EPA ha aumentado esa inversión anual casi en un 400%. Más de la mitad de los fondos disponibles para este ciclo de subvenciones (aproximadamente $160 millones) provienen de la inversión histórica de $1,500 millones de la Ley Bipartidista de Infraestructura del presidente Biden. Esta inversión también permite que los montos máximos de adjudicación de las subvenciones MAC aumenten significativamente de $500,000 a un nuevo máximo de $5 millones por adjudicación.